- La
Sala de la Corona del Edificio Pignatelli ha acogido la lectura de un
manifiesto por parte de las entidades que integran la Federación Salud
Mental Aragón
- El
acto ha contado con la presencia del director general de Salud Mental del
Gobierno de Aragón y la alcaldesa de Zaragoza
La
conmemoración del Día Mundial de la Salud Mental (DMSM), que esta mañana se ha
celebrado en el Edificio Pignatelli con una jornada de sensibilización, se ha
centrado en la salud mental como un derecho universal. Un encuentro, organizado
por la Federación Salud Mental Aragón y ASAPME Aragón con el patrocinio de
Janssen.
Al acto, que ha estado presidido por la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, y el director general de Salud Mental del Gobierno de Aragón, Manuel Corbero, han asistido representantes de ASAPME Aragón, ASAPME Teruel, ASAPME Huesca, ASAPME Bajo Aragón, ASAEME, Asociación Paso a Paso, TOC Aragón y El Volcán.
En el transcurso de la celebración, miembros de las distintas asociaciones de pacientes que integran la Federación han leído algunos mensajes en línea con el manifiesto que impulsa la Confederación Salud Mental España. Así, la presidenta de la Federación, Concepción López, ha destacado en su intervención que “salud mental es un derecho inherente a la condición humana y que su disfrute no entiende barreras ni de fronteras”.
Toda vez que se ha experimentado un problema de salud mental, debe reconocerse el derecho a un modelo rehabilitador universal que ahonde en el potencial de las personas y en su proyección social. Para ello, han insistido las asociaciones, hay que ejercer una vigilancia que garantice la aplicación de este derecho a través de un proyecto de vida emancipador; algo que, por otra parte, debe estar recogido en las políticas que se impulsan desde las administraciones públicas.
En este sentido, a partir de lo que establece la Convención de la ONU sobre las personas con discapacidad, desde las asociaciones de pacientes con enfermedades mentales se reclama a las instituciones que adopten las siguientes medidas:
– Trabajar por la toma de conciencia y el entendimiento de los problemas asociados a la salud mental dado que el estigma sigue dificultado la práctica de sus derechos.
–
Procurar
un futuro habitable para los niños y niñas, permitiendo que se desarrollen en
un entorno de bienestar emocional.
–
Garantizar
la libertad y seguridad de las personas, así como su protección ante tratos
degradantes. Entramos en un nuevo tiempo para la salud mental y es preciso
dejar paso a espacios de recuperación compatibles con la dignidad humana.
El
manifiesto insiste en la necesidad de continuar con las campañas de
sensibilización y prevención del suicidio en el ámbito escolar, en el
universitario y en la esfera laboral. Además, recuerda que el cuidado de la
salud mental debe tener un enfoque global que implique la participación del
conjunto de la sociedad.
Algunos datos sobre salud mental
Según el último informe del Ministerio de Sanidad (con datos de 2017) el porcentaje de personas con un diagnóstico clínico asciende al 27,4% de la población. Por su parte, la Sociedad Española de Psiquiatría y Salud Mental, en un estudio realizado este mismo año, eleva esa cifra hasta el 29%.
En otro informe elaborado por la Confederación Salud Mental España, se destaca que casi 6 de cada 10 españoles (57%) se sienten preocupados, temerosos, deprimidos o tristes, y cuatro de cada 10 (39,3%) valora negativamente su salud mental (la califican de regular, mala o muy mala).
En definitiva, se ha pasado de hablar de que los problemas de salud mental afectaban a 1 de cada 4 personas, a afirmar que actualmente afectan ya a casi 1 de cada 3. Son datos que confirman las alarmas lanzadas desde instituciones sanitarias como la Organización Mundial de la Salud, que ya alertó de que los problemas de salud mental se convertirían en la “nueva pandemia”.
Representantes de las asociaciones en el acto
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